“Mucho Susana, mucho Susana”. Lo suelta a este diario un veterano socialista andaluz totalmente identificado con la presidenta de la Junta de Andalucía ante el congreso regional del PSOE andaluz que se celebra en Granada el próximo fin de semana. Ese “mucho Susana, mucho Susana” ejemplifica hasta qué punto se cocina un encuentro orgánico para autobombo de la imagen de la socialista con más proyección nacional, la lideresa que podría haber triunfado en unas hipotéticas primarias tras la Conferencia Política de Madrid.
Por –previsible– aclamación asumirá Díaz la secretaría general del PSOE-A el domingo 24 de noviembre al mediodía tras un discurso en el que intentará desvelar sus líneas de actuación como dirigente de la federación socialista más importante de España.
“Será un paseo, sin problemas ninguno. Nada de nada. Se votará todo por aclamación y ya está. Lo que ella proponga y decida estará bien. No hay ninguna tensión”, relata a El Confidencial un histórico miembro del PSOE de Andalucía.
Una de las incógnitas del congreso será la función que asumirá el actual vicesecretario general, Mario Jiménez, que aún no ha dado el previsible salto a la Ejecutiva Federal por el que tanto ha luchado Griñán, su mentor. Díaz podría mantener a Jiménez como número 2 del partido o bien suprimir este cargo y situarlo como secretario de organización en detrimento del gaditano Juan Cornejo.
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